Author

Dr. Claudia López-Morago Casamayor

 

La Deforestación en el Hábitat del Orangután de Tapanuli: Un Plan de Conservación Medioambiental

Resumen

Ya en 2017, momento de su identificación, el orangután de Tapanuli fue clasificado como especie en peligro crítico de extinción, al contar únicamente con alrededor de 800 individuos. A pesar de los esfuerzos por proteger algunos de los territorios con mayor biodiversidad del planeta, Sumatra sigue teniendo uno de los niveles más altos de deforestación. La explotación no sostenible de los recursos naturales amenaza seriamente la supervivencia de estos primates. Proteger el hábitat, endurecer las leyes en materia de medioambiente, así como crear un proyecto educativo consistente, son algunas de las medidas que se proponen en este artículo para evitar la desaparición del orangután de Tapanuli.

Palabras clave

Primate, Orangután de Tapanuli, Pongo tapanuliensis, Batang Toru, Sumatra, deforestación, conservación, biodiversidad

Introducción

Casi un siglo después, desde los primeros rumores de su existencia, el descubrimiento de una nueva especie de orangután fue confirmado en 2017 (Nater et al., 2017). Durante años, pobladores de la zona recordaban una hembra  de orangután con características distintas a las descritas en Pongo abelii, la otra especie de orangután de Sumatra (Reese, 2017). Al contrario que los géneros de primate del continente africano (Pan y Gorilla), los orangutanes (Pongo) son individuos solitarios (Roth et al., 2020). Aunque en algunas circunstancias pueden llegar a formarse grupos, este género de primates desarrolla, lo que se conoce como dinámica fisión-fusión (Schuppli et al., 2017). En etología, una sociedad fisión-fusión, es aquella en la que el tamaño del grupo varía a medida que pasa el tiempo – por ejemplo, durmiendo en el mismo lugar (fusión) y dividiéndose durante el día para buscar alimento (fisión). Este tipo de comportamiento, junto al reducido número de individuos, dificulta la investigación de estos primates (Llorente, 2019). Los orangutanes son los únicos grandes primates procedentes de Asia. De las tres especies descritas, dos habitan en Sumatra y una en Borneo.

Sumatra solía estar principalmente cubierta por selva tropical, siendo hogar de numerosas especies protegidas como el tapir, el rinoceronte de Sumatra o la rafflesia. Desafortunadamente, la explotación no sostenible de recursos naturales, está amenazando gravemente la existencia de estos ecosistemas (Voigt et al., 2018).

El plan de acción para prevenir la desaparición total de los orangutanes solamente puede ser planteado como un trabajo conjunto entre los sectores políticos y sociales, donde la educación y el uso, sostenible y responsable, de los recursos naturales sea una prioridad (Voigt et al., 2018).

El objetivo principal de este estudio es dar a conocer la situación actual del orangután de Tapanuli, su entorno y sus principales amenazas, haciendo hincapié en la deforestación de su hábitat. Además, se proponen algunas recomendaciones para crear un plan estratégico que evite la desaparición de esta especie de primate.

Una nueva especie

Hasta el año 2017, únicamente seis especies de primates no humanos habían sido reconocidas: orangutanes de Sumatra (Pongo abelii) y de Borneo (Pongo pygmaeus), gorilas occidental (Gorilla gorilla) y oriental (Gorilla beringei), chimpancés (Pan troglodytes) y bonobos (Pan paniscus) (Nater et al., 2017; Llorente, 2019). Sin embargo, la gran variabilidad existente en cuanto a su morfología, código genético y comportamiento, hace que la taxonomía de estas especies siga cambiando (Llorente, 2019). Este hecho es más acusado en el género Pongo, donde el aislamiento de sus hábitats y el reducido número de individuos dificulta, aún más, su estudio (Nater et al., 2017).

La diferenciación entre Pongo pygmaeus y Pongo abelli, orangutanes autóctonos de Borneo y Sumatra respectivamente, se produjo en 2001 (Nater et al., 2017). Años después y tras varias décadas de trabajo de campo, en 2017 fue descrita una nueva especie de orangután, Pongo tapanuliensis. Esta nueva especie, considerada el primate más aislado del mundo (Rahman et al., 2019), fue encontrada en la zona de Batang Toru, al norte de la isla de Sumatra (Nater et al., 2017). El exhaustivo estudio de un macho, muerto a manos de la población local en noviembre de 2013, permitió a los investigadores determinar las características morfológicas y genéticas de esta nueva especie (Nater et al., 2017). Entre las tres especies existen diferencias morfológicas, tanto en el esqueleto craneal, como en el postcraneal. La morfología corporal entre P. tapanuliensis y P. abelli es similar. En cuanto al pelaje, P. tapanuliensis tiene un pelo más corto y “encrespado” que P. abelli, y un vello fácil más abundante.  Los machos dominantes adultos poseen bridas planas y cubiertas de vello. Estas bridas se asemejan a las de P. pygmaeus cuando se trata de machos dominantes de avanzada edad. Las hembras de P. tapanuliensis, al contrario que P. pygmaeus, poseen vello facial (Nater et al., 2017). El análisis genético realizado sirvió para corroborar las divergencias halladas entre las tres especies (Nater et al., 2017).

Ya en el momento de su descubrimiento, P. tapanuliensis contaba únicamente con alrededor de 800 individuos  en libertad, por lo que fue clasificada como especie “en peligro crítico de extinción” según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas en inglés) (Novak et al., 2017)

Batang Toru: el hábitat de un nuevo orangután

Al igual que Pongo abelii, la nueva de especie de orangután, P. tapanuliensis, habita en la isla indonesia de Sumatra, concretamente en el ecosistema de Batang Toru, al sur del Lago Toba, en la provincia de Sumatra Septentrional. En base a las investigaciones realizadas entre los años 2000 y 2012, se sabe que la extensión del territorio habitado por estos primates comprende una superficie de 1.023 km2 (Wich et al., 2016; Wich et al., 2019). La población estimada de 767 ejemplares, estaría distribuida de manera desigual por los tres principales bosques: 581 individuos en el área oeste, 162 en el área este y únicamente 24 en la Reserva de Sibual-bulai, con posibilidad de una pequeña población en el norte y/o en la Reserva de Lubuk Raya (Rahman et al, 2019; Wich et al., 2019). Según la distribución de los nidos observados durante los trabajos de campo, la conexión entre el área oeste del bosque y la Reserva de Sibual- Bulai existe. Esto significa que, aunque de manera moderada, es factible la interrelación entre los diferentes grupos de orangutanes. Sin embargo, la conexión entre la parte oeste y la este, sigue siendo prácticamente nula, debido a la carretera provincial que une Tarutung y Padangsidempuan (Wich et al., 2019).

(Figura 1. Mapa de Sumatra mostrando el territorio ocupado por Pongo tapanuliensis)

Estudios recientes aseguran que la población actual de Batang Toru está formada por los últimos ejemplares vivos de una población ancestral de orangutanes, que en algún momento de su historia se extendió desde el Lago Toba hasta el sur de la isla (Nater et al., 2017). Esta investigación sugiere, además, que las especies del norte de Sumatra (P. abelii) y Borneo (P. pygmaeus) pudieron ser descendientes de esta población ancestral, ahora casi extinta, de la que sólo quedan unos cuantos ejemplares en Batang Toru (Nater et al., 2017).

Principales amenazas

Se entiende como deforestación, la conversión permanente de los bosques, en territorio para otros usos, principalmente por causas antropogénicas (Basyuni et al., 2018).

A pesar de los esfuerzos por proteger algunas de las áreas con mayor diversidad del planeta, Sumatra sigue teniendo uno de los niveles más altos de deforestación (Poor et al., 2019; Orizal et al., 2020). Se estima que el 43% de la destrucción de los bosques en el norte de Sumatra ha sido consecuencia de la construcción de carreteras, la expansión agrícola, la tala ilegal de árboles y la minería (Supriatna et al., 2017; Orizal et al., 2020). 

En 1989, momento en el que se llevan a cabo las primeras investigaciones, los bosques ocupaban aproximadamente el 71% de la región de Tapanuli y un 10% era selva inundable. En 2019, estas cifras bajaron drásticamente. Se calcula que en la actualidad solamente queda un 44% de bosque y un 1% de selva inundable. En este mismo periodo de tiempo, las plantaciones de palma aumentaron del 8% al 19%, según los últimos estudios (Orizal et al., 2020).

Otra de los principales problemas en la isla es la tala de árboles (Supriatna et al., 2017; Wich et al., 2019; Orizal et al., 2020). Esta práctica, conocida como “logging”, no puede considerarse causante de la deforestación, sin embargo, las consecuencias de esta industria sí que lo son (Supriatna et al., 2017). La ley forestal indonesia permite la tala de árboles a empresas madereras, siempre y cuando los bosques puedas recuperarse tras 35 años. Estas empresas, en muchas ocasiones, provocan una sobreexplotación de los territorios, consiguiendo que estos sean denominados como “bosques degradados”, en otras palabras, el bosque deja de ser reconocido como bosque. Una vez hecho oficial el cambio de denominación, otra empresa, normalmente socia de la primera, solicita una licencia para transformar esta zona sin utilidad en plantaciones de uso comercial, como la palma aceitera y la acacia (Supriatna et al., 2017).

Algunos estudios sugieren que los orangutanes podrían convivir con este tipo de plantaciones, siempre que su producción fuese sostenible y el territorio adyacente estuviese protegido (Ancrenaz et al., 2005; Spehar et al., 2017). Sin embargo, aún no está claro si esta situación sería viable a largo plazo (Voigt et al., 2018). Solamente un 85% del territorio habitado por esta especie es considerado como ecosistema protegido, el 15% restante estaría destinado a la agricultura (Novak et al., 2017; Sloan et al., 2018; Wich et al., 2019).

Estas actividades fragmentan el hábitat de los primates, dividiendo su población en grupos aislados. Este aislamiento provoca una disminución del número de individuos, ya que se ven obligados a competir por el escaso alimento o se convierten en objetivos fáciles para los cazadores (Supriatna et al., 2017). La destrucción de los bosques tiene un impacto especialmente negativo para las hembras de orangután, cuyo comportamiento es filopátrico y tienden a permanecer en el mismo territorio toda su vida (Wich et al., 2019).

Según los científicos, 500 es el número mínimo de ejemplares que debe tener un grupo de orangutanes para asegurar su variabilidad genética y su supervivencia como especie. La mayoría de grupos aislados de P. tapanuliensis no alcanza esta cifra (Supriatna et al., 2017). Esto, sumado a la baja tasa reproductiva de la especie, puede terminar con su extinción (Voigt et al., 2018).

El orangután de Tapanuli cumple con uno de los roles ecológicos más importantes para los bosques de Sumatra, la dispersión de semillas. Sin ellos, la supervivencia de estos ecosistemas se vería claramente en peligro (Rahman et al., 2019).

Un futuro para el orangután de Tapanuli

Una conservación efectiva del orangután de Tapanuli requiere de un esfuerzo conjunto entre los órganos de Gobierno competentes y la sociedad. Para asegurar la supervivencia de esta especie, se presentan las siguientes recomendaciones:

(1) El hábitat de P. tapanuliensis debe ser estrictamente protegido, además, las diferentes áreas de bosque en las que habitan los orangutanes deben ser conectadas a través de corredores ecológicos con el fin de preservar la biodiversidad, mantener la variabilidad genética y favorecer la migración y la interrelación entre los diferentes grupos, la fauna y la flora silvestres (Nater et al., 2017; Sloan et al., 2018; Wich et al., 2019; Sherman et al., 2020).

(2) Es necesario un endurecimiento de las leyes indonesias en materia de medioambiente, así como el establecimiento de un plan de acción que prevenga y mitigue los conflictos entre la fauna y la población local (Nater et al., 2017; Wich et al., 2019; Sherman et al., 2020).

(3) El proyecto de la construcción de una central hidroeléctrica al sur del ecosistema de Batang Toru debe ser cancelado. Esta construcción amenaza con la destrucción de, al menos, un 8% de territorio habitado por orangutanes, pudiendo provocar su completa extinción, además de perjudicar otras especies amenazadas (Sloan et al., 2018; Wich et al., 2019).

(4) El rescate, la rehabilitación y la reintroducción de ejemplares, son estrategias necesarias hoy en día y mientras no se lleven a cabo las tres medidas anteriormente descritas. Sin embargo, no deben ser consideradas como la estrategia prioritaria para asegurar la supervivencia de las especies primates (Sherman et al., 2020).

Además de estas recomendaciones, es importante destacar que la educación ambiental es un aspecto fundamental en los proyectos de conservación de vida salvaje, especialmente en aquellas zonas donde animales y seres humanos comparten territorio (Pohnan et al., 2015; Ma’ruf et al., 2016; Freund et al., 2020). Un programa educativo competente que aumente el conocimiento sobre especies y hábitats amenazados, promoviendo un comportamiento sostenible, puede verse reflejado, no sólo en cambios de comportamiento individual, sino en mejores políticas gubernamentales (Ma’ruf et al., 2016; Freund et al., 2020).

Conclusiones

Sumatra, a pesar de ser una de las islas con mayor biodiversidad del planeta, sigue siendo uno  de los territorios más afectados por la deforestación. Se estima que en las últimas décadas la mitad de los bosques y selvas inundables han sido destruidos y sustituidos por plantaciones agrícolas de palma aceitera y acacia. El orangután de Tapanuli, ya en peligro crítico de extinción desde su descubrimiento, es muy vulnerable a la fragmentación de su hábitat. La construcción de carreteras, la expansión agrícola, la tala ilegal de árboles y la minería provocan el aislamiento de las poblaciones y ponen en riesgo su supervivencia. Es necesario que se tomen medidas urgentes, como las aquí sugeridas, para la conservación de esta especie y que estas se lleven cabo de manera conjunta entre los Gobiernos y la sociedad. Por último, destacar el importante papel de la educación medioambiental en los proyectos de conservación de la vida silvestre.     

Referencias

Ancrenaz, M., Oram, F., Ambu, L., Lackman, I., Ahmad, E., Elahan, H., … y Meijaard, E. (2015). Of Pongo, palms and perceptions: a multidisciplinary assessment of Bornean orang-utans Pongo pygmaeus in an oil palm context. Oryx, 49(3), pp. 465-472.

Basyuni, M., Sulistiyono, N., Wati, R., y Hayati, R. (2018). “Deforestation trend in North Sumatra over 1990-2015”, International Conference on Agriculture, Environment, and Food Security IOP Conf. Series: Earth and Environmental Science, 122.

Freund, C. A., Achmad, M., Kanisius, P., Naruri, R., Tang, E., y Knott, C. D. (2020). Conserving orangutans one classroom at a time: Evaluating the effectiveness of a wildlife education program for school‐aged children in Indonesia. Animal Conservation, 23(1), pp. 18-27.

Llorente, M. (2019). Primates. Biología, comportamiento y evolución. Barcelona: Lynx Edicions.

Nater, A., Mattle-Greminger, M. P., Nurcahyo, A., Nowak, M. G., De Manuel, M., Desai, T., … y Lameira, A. R. (2017). Morphometric, behavioral, and genomic evidence for a new orangutan species. Current Biology, 27(22), pp. 3487-3498.

Nowak, M. G., Rienzi, P., Wich, S. A., Meijaard, E., y Fredriksson, G. (2017). The IUCN red list of threatened species 2017. Pongo tapanuliensis, 2017-3.

Onrizal, Maulana, M. I., y Munir, E. (2020). “Assessment of oil palm plantation in South Tapanuli using remote sensing and geographic information system in the last three decades”, I International Conference on Physics and Applied Physics. AIP Publishing LLC.

Pohnan, E., Ompusunggu, H., y Webb, C. (2015). Does tree planting change minds? Assessing the use of community participation in reforestation to address illegal logging in West Kalimantan. Tropical Conservation Science, 8(1), pp. 45-57.

Poor, E. E., Frimpong, E., Imron, M. A., y Kelly, M. J. (2019). Protected area effectiveness in a sea of palm oil: A Sumatran case study. Biological Conservation, 234, pp. 123-130.

Rahman, D. A., Rinaldi, D., Kuswanda, W., Siregar, R., Noorch, F., Hakim, F., … y Putro, H. R. (2019). Determining the landscape priority and their threats for the Critically Endangered Pongo tapanuliensis population in Indonesia. Biodiversitas Journal of Biological Diversity, 20(12), pp- 3584-3592.

Reese, A. (2017). New orangutan species identified. Nature, 551, p. 151.

Roth, T. S., Rianti, P., Fredriksson, G. M., Wich, S. A., y Nowak, M. G. (2020). Grouping behavior of Sumatran orangutans (Pongo abelii) and Tapanuli orangutans (Pongo tapanuliensis) living in forest with low fruit abundance. American Journal of Primatology, 82(5), pp. 1-11.

Schuppli, C., Forss, S., Meulman, E., Atmoko, S. U., van Noordwijk, M., y van Schaik, C. (2017). The effects of sociability on exploratory tendency and innovation repertoires in wild Sumatran and Bornean orangutans. Scientific reports, 7(1), pp. 1-12.

Sherman, J., Ancrenaz, M., Voigt, M., Oram, F., Santika, T., Wich, S. A., y Meijaard, E. (2020). Envisioning a future for Bornean orangutans: Conservation impacts of action plan implementation and recommendations for improved population outcomes. Biodiversitas, 21(2), pp. 465-477.

Sloan, S., Supriatna, J., Campbell, M. J., Alamgir, M., y Laurance, W. F. (2018). Newly discovered orangutan species requires urgent habitat protection. Current Biology, 28(11), pp. 650-651.

Sloan, S., Alamgir, M., Campbell, M. J., Setyawati, T., y Laurance, W. F. (2019). Development corridors and remnant-forest conservation in Sumatra, Indonesia. Tropical Conservation Science, 12, pp. 1-9.

Spehar, S. N., y Rayadin, Y. (2017). Habitat use of Bornean orangutans (Pongo pygmaeus morio) in an industrial forestry plantation in East Kalimantan, Indonesia. International Journal of Primatology, 38(2), pp. 358-384.

Supriatna, J., Dwiyahreni, A. A., Winarni, N., Mariati, S., y Margules, C. (2017). Deforestation of primate habitat on Sumatra and adjacent islands, Indonesia. Primate Conservation, 31, pp. 71-82.

Surya, S., y Apriliany, P. D. (2016). Knowledge, attitudes and behavior of university students towards environmental issues in Indonesia. Sains Humanika, 8, pp. 1-2.

Voigt, M., Wich, S. A., Ancrenaz, M., Meijaard, E., Abram, N., Banes, G. L., … y Gaveau, D. (2018). Global demand for natural resources eliminated more than 100,000 Bornean orangutans. Current Biology, 28(5), pp. 761-769.

Wich, S. A., Singleton, I., Nowak, M. G., Atmoko, S. S. U., Nisam, G., Arif, S. M., … y Gaveau, D. L. (2016). Land-cover changes predict steep declines for the Sumatran orangutan (Pongo abelii). Science advances, 2(3), e1500789.

Wich, S. A., Fredriksson, G., Usher, G., Kühl, H. S., y Nowak, M. G. (2019). The Tapanuli orangutan: Status, threats, and steps for improved conservation. Conservation Science and Practice. ISSN 2578-4854.